Gran Mexteño
Esta gama combina a la perfección los pilares del mezcal tradicional, con una doble destilación que equilibra fuerza y suavidad. Cada variedad destaca un matiz distinto, todas enaltecidas por un ensamble meticuloso que invita tanto a beber solo como a inventar cócteles con carácter.


El espíritu del agave, reinventado
En lo profundo de Oaxaca, donde la tierra respira historia y el fuego guarda secretos ancestrales, nace Gran Mexteño. Una colección de mezcales que une el carácter del agave Espadín con la nobleza del agave azul, doblemente destilados en cobre para conservar su alma más pura.
Cada variedad es una expresión distinta de esta herencia:
Espadín. Clásico y esencial, que honra la raíz de la tradición mezcalera.
Habanero. Atrevido y vibrante, con un picante que despierta los sentidos.
Jalapeño. Equilibrado y fresco, con un matiz suave que sorprende en cada sorbo.
Tequilana. Innovador y elegante, con notas herbales y florales que amplían el horizonte del mezcal.
Un perfil ahumado y vibrante
Notas terrosas, cítricas y picantes en un equilibrio singular
En nariz, Gran Mexteño Espadín ofrece un aroma robusto con toques vegetales y un humo elegante. La variedad Habanero despliega matices intensos y especiados, mientras que Jalapeño aporta un frescor verde con un picante más suave. Tequilana, por su parte, sorprende con notas herbales y florales que amplían la experiencia.
En boca, la colección se caracteriza por su suavidad y cuerpo sedoso, con un ahumado persistente que se funde con los matices propios de cada expresión. El final es limpio, equilibrado y lleno de carácter, reflejo auténtico de la tradición oaxaqueña.

Cuatro variedades únicas
Ideal para disfrutar solo o en cóctel, resaltando su carácter auténtico
Gran Mexteño está concebido para acompañar diferentes momentos: puede beberse pausadamente en copa, disfrutarse frío con hielo o ser la base de combinados que buscan fuerza y personalidad.
Cada variedad aporta un matiz único: Espadín, con la esencia más clásica; Habanero, intenso y vibrante; Jalapeño, fresco y equilibrado; y Tequilana, herbal y elegante.
La mejor forma de saborearlos es solos o con hielo, permitiendo apreciar la suavidad de su textura y los matices del agave en equilibrio con el toque ahumado. En coctelería, realzan cada mezcla sin perder identidad, ofreciendo experiencias llenas de carácter y autenticidad.
De esta manera, Gran Mexteño se convierte en un mezcal versátil, pensado para disfrutar en cualquier ocasión.
